APARENTEMENTE EL MEDIOCRE PERSONAJE que no sabe ni el año de la expropiacion petrolera, PERO ESO SI, EXIGIO PARTICIPAR EN EL DEBATE, solo queria apantallar a una conductora de los aztecos.
Exhibe Kahwagi convoy policiaco
Exhibe Kahwagi convoy policiaco
El convoy era aparatoso. Un policía motociclista por delante, seguido de un auto negro, Ford police interceptor, ya viejo pero grandote, de los que usaban los judiciales hace años; después una flamante Hummer rojo chillante y, detrás, una camioneta tipo Julia
CIUDAD DE MÉXICO.- El miércoles , pasadas las 3:00 de la tarde, los comensales que ocupaban las mesas de banqueta del restaurante "Primos", en Michoacán esquina con Mazatlán, Colonia Condesa observaron, entre intrigados y temerosos, la llegada de un convoy que se detuvo justo a las puertas del local.
El convoy era aparatoso. Un policía motociclista por delante, seguido de un auto negro, Ford police interceptor, ya viejo pero grandote, de los que usaban los judiciales hace años; después una flamante Hummer rojo chillante y, detrás, una camioneta Dodge Ram con caseta tipo "julia".
"¡Es Juan Camilo!", comentó una comensal. Su acompañante respondió: "¡Es Marcelo!". Otro, más precavido apuntó "debe ser Peña Nieto, mejor vámonos", y pidió la cuenta.
Pero, ¡sorpresa!
Previo operativo de protección a cargo de cuatro escoltas que bajaron del Ford negro y dos más de la "julia", además del motociclista, todos en posición de combate, panza por delante y mirada al cielo, de la Hummer descendió el presidente del Panal.
Sí, el boxeador, ex diputado y ex coordinador parlamentario del Partido Verde, el dirigente político por el que claman las masas, Jorge Kahwagi, bajó de un atlético salto de su Hummer roja, vestido con jeans ajustados de color azul y una camisola que dejaba ver sus desfallecientes pectorales, tenis de marca y un celular en la mano.
Durante varios minutos el líder del Panal deambuló a lo largo y ancho de la banqueta, celular en mano y el audífono en la oreja.
Mientras tanto, los escoltas se colocaron en posición de combate: tres en el arroyo y tres en el camellón. El motociclista prefirió darle gusto a la pupila admirando a las comensales y a otras mujeres que pasaban por ahí.
Pese a las gestiones de quien actuaba como su asistente, el boxeador tuvo que esperar mesa. Los escoltas, cada vez más nerviosos por las miradas y comentarios de los comensales, prefirieron replegarse al camellón y a la acera de enfrente.
Pasados unos minutos, la invitada del alto dirigente de la Patria hizo su aparición. Una novel conductora del "Canal del Ajusco" partió plaza por el paseíllo de la banqueta, luciendo sus encantos.
Sentados uno al lado del otro, ambos desplegaron sus dotes mientras esperaban mesa, soportando las miradas de reproche. Los escoltas seguían en posición de combate.
¿La patrulla Ford negra y la camioneta con caseta de "julia" son de algún cuerpo de seguridad del Estado de México?
Los seis escoltas, ¿quien los comisionó; quién les paga?
¿A quién teme el ex boxeador para requerir tamaño despliegue?
¿O es que simplemente su amigo Peña Nieto le ayuda a apantallar a estrellitas de la pantalla chica?
Es pregunta.